Muy cerca del Portal de Valldigna, un precioso portón de madera encajado en un arco de medio punto esconde un patio con un gran trozo de muralla árabe. En el interior, la iluminación, el mobiliario, la decoración (un cuadro del precioso mapa del Padre Tosca, figuras de Lladró…), las paredes que asoman su antigüedad entre el Pladur, y las vigas de madera del techo hacen acogedor un espacio bautizado La muralla de Valencia que aúna dos experiencias, la visita turística y la cata de productos. Noelia ofrece un recorrido circular de hora y media por los escenarios de las fiestas más conocidas de Valencia que acaba con una degustación gastronómica de producto valenciano. ¿Has bajado alguna vez a la cripta de la cárcel de San Vicente Mártir? ¿Sabes donde se plantó la primera Falla de València? Síguela que ella te explicará algunas curiosidades de la ciudad poco conocidas por los locales. Edu por su lado organiza catas exclusivas de cervezas artesanas valencianas y vinos de la tierra. Eso de momento, para el futuro barrunta degustaciones de productos tan apetecibles como quesos, aceites, panes o chocolates. La Muralla de Valencia aúna arte y gastronomía en un espacio que se apoya sobre la historia milenaria de la ciudad. AU