DEL JUEVES 20 AL DOMINGO 23/2
TEATRE PRINCIPAL. Barques, 15
“Obrar bien, que Dios es Dios”, nos recuerda Calderón de la Barca. En El gran teatro del mundo, el mundo es un escenario en el que cada personaje interpreta un papel y, al finalizar la obra, recibirá un premio o castigo según haya obrado en la vida. Calderón nos presenta la genial osadía de que Dios visite nuestro mundo para organizar una función de teatro con la raza humana como intérprete, y la Ley de Gracia como apuntador. La Compañía Nacional de Teatro Clásico (CNTC) nos presenta una pieza con un imaginario escénico inédito en su tiempo, una versificación de extraordinaria belleza y unas reflexiones espirituales y filosóficas profundas sobre la naturaleza de nuestra existencia. GLORIA POZUELO