SALA ULTRAMAR. Alzira, 9
Todos los días sale un vuelo con destino Azerbaijan, todos los días puedes perder ese vuelo. En las instalaciones de un aeropuerto se establece la conexión entre dos personas, un ebanista y una bióloga. Una relación que nada tiene que ver con las avenencias habituales entre parejas a las que nos creemos enseñados. Con los contrastes que existen entre la calidez propia de la madera y la frialdad del hierro, descubriremos que Azerbaijan podría ser un lugar, pero también un momento, al que solo se puede ir una vez en la vida. Porque cuando se intenta regresar, seguramente ha cambiado, por lo que nunca es el mismo, nunca será igual. La sala Ultramar repone, un año después de su estreno, su primer montaje de producción propia, dirigido por Eva Zapico. LUCAS SÁEZ