Bares, que lugares, tan gratos para conversar… Como los echamos tanto de menos, La Filmoteca nos propone esta semana en La Festa del Curt a Casa una serie de cortos que desarrollan sus historias, total o parcialmente, en restaurantes, bares y cafeterías en los que todos vemos visto la vida pasar alguna vez. ¿Las parejas deben los mismos gustos para poder funcionar? Hidrólisis de Sergi Miralles se plantea esta pregunta recordándonos aquellos tiempos en los que íbamos a conciertos y charlábamos tranquilamente en las terrazas. Cruces de David Martínez i Pablo Esparza nos sitúa en un mesón de carretera con su larga barra llena de tapas acristaladas, una tele que acompaña a los seres solitarios y una máquina tragaperras que pone la música de fondo. En este templo de camioneros y viajeros de paso, que languidece por la construcción de la autopista, nace una amistad fortuita que abre unos cuantos interrogantes. En Piva (“cerveza” en checo), del realizador ilicitano Jaume Quiles, la única palabra que se cruzan un labrador y una camarera muy meticulosos es precisamente esa, “piva”. Apolo 81 de Óscar Bernàcer enseña el ecosistema de un bar donde se bebe, se come, se toca música (¡de Pollock!) y… también se juega. Pero no, ni al Truc ni al dominó, a un juego de cartas que indaga de lo complicado de las citas y las relaciones amorosas con humor y surrealismo. Quien no apuesta, no gana. Por último, Treinta segundos de Alejandro Portaz es un encuentro de treinta segundos con ese camarero de toda la vida capaz de recitar el menú de arriba abajo sin derramar una gota de cerveza de las veinte cañas que lleva en la bandeja con una sola mano. ¡Puro arte! AU
V.E. Cinema
DIJOUS 23/1, 20H. 4€
La Fábrica de Hielo porta quatre anys organitzant estes trobades entre el públic i directors valencians.