En Valencia, a escasos metros del mar, se levanta un conjunto de edificios emblemáticos que pertenecieron a la Marina Auxiliante, la sociedad de pescadores fundada a finales del siglo XIX por patronos y amos de las barcas, que ejerció su actividad en la playa de El Cabanyal hasta mediados del siglo XX. Son la Lonja del pescado, la Fábrica de Hielo y la Casa dels Bous, que daba cobijo a los bueyes encargados de meter y sacar las barcas pesqueras del mar, necesarios también para la pesca del bou (pesca de arrastre), que Sorolla inmortalizó en alguno de sus lienzos. Precisamente en el primer piso de este edificio guardó el pintor valenciano alguna de sus famosos óleos.
Ningún rótulo identifica al Atelier dels Bous, con entrada en la calle Eugenia Viñes, pero es inconfundible por su característico reloj solar en la fachada sur y las cabezas de dos bueyes bajo el balcón flanqueando la puerta principal al edificio, sólo visibles desde el interior del patio. Ahora están totalmente desfiguradas por la erosión, pero en su día portaron cornamentas reales. Fue taller metalúrgico para la industria naviera y del ferrocarril, estuvo en manos del Ayuntamiento de Valencia durante ocho años en los que el edificio permaneció cerrado y, una vez recuperado por la Marina Auxiliante, se hicieron tímidos intentos de apertura, cediéndo el espacio a Desayuno con viandantes o acogiendo la inauguración del Cabanyal Íntim 2015.
Pues bien, hace un año, en diciembre de 2014, la asociación La fábrica del sol lo despertaba finalmente del coma tomando las riendas de la gestión. Hizo falta mucha limpieza y la restauración de las fachadas para empezar a darle un nuevo uso sociocultural a este espacio que no es ni público ni privado. Los socios proponen, filtran y gestionan las actividades que acoge esta casa que actúa como imán de proyectos de la ciudadanía y simboliza la innovación en procesos de gestión cultural en régimen colaborativo. La figura del ciudadano-gestor existe y se expande como el aceite, parece que con el respaldo del nuevo consistorio. El Ayuntamiento de Valencia ultima las bases de un concurso para dar uso a una decena de espacios en Ciutat Vella con el solar Corona como referente. Ya se verá…
Echando la vista atrás, en los 650 m2 del Atelier han pasado muchas cosas durante estos doce meses. Conciertos, teatro, talleres de horticultura urbana o mbira (instrumento ancestral africano), un espectáculo de shibari (un estilo japonés de bondage), una fiesta surfera… El mes pasado presentaban el proyecto El Cabanyal de hoy y de ayer del colectivo Cultura y patrimonio, una visión de los orígenes del barrio y de cómo ha evolucionado durante los años del PEPRI, el polémico plan urbanístico. Pero no todos los eventos tienen que ver con el barrio, y para muestra, un botón. En diciembre tienen programada la actuación de Pedro Montesinos y preparan un mercadillo artesanal para el puente. Estad atentos a su Facebook, que echa humo. S.M.