IVAM. Guillem de Castro, 118
La figura de Alexander Ródchenko (1881-1956) es una de las más importantes de las vanguardias históricas. Su entusiasmo por el advenimiento de la Revolución Rusa de 1917 provoca en él, como en el resto de sus colegas constructivistas, la idea de reformar a la sociedad y al ser humano. La utopía, ni más ni menos. Sus cualidades como artista versátil (lo encontramos en 1925 en la Exposición Universal de París dando forma al Club Obrero, un interior para el hombre y la mujer socialistas) y sus estudios sobre las formas o el color harán de él uno de los líderes de una vanguardia efímera, castrada por el poder. El IVAM presenta estos días una muestra de su obra, comisariada por Joan Ramon Escrivà. En ella podemos contemplar una selección de sus fotografías, portadas de libros (Sobre esto, de Maiakovski, de 1923) o revistas (LEF o URSS en construcción). Esta muestra se complementa con otra, Un futuro en construcción. El libro soviético en el IVAM. En ella nos podemos hacer una idea de la fértil labor de mujeres artistas como Várvara Stepanova o Liubov Popova y contemplar libros emblemáticos del periodo como Kunstism 1914-1924 (1925), de El Lissitzky y Hans Arp. RAFA MARTÍNEZ