Megan Maxwell no necesita presentación entre quienes aman la novela romántica. Con más de sesenta títulos publicados y millones de lectores fieles en España y América Latina, la autora madrileña regresa a las librerías con una historia que toca el corazón: Nuestro largo adiós (Esencia, 2025).
La historia de Nuestro largo adiós se mueve entre dos islas que, aunque separadas por miles de kilómetros, comparten una atmósfera de luz, belleza y emociones intensas: Ibiza y Santorini. La primera es un territorio habitual en la narrativa de Maxwell, pero sorprendentemente, esta será la primera vez que la escritora la incluye también como destino final de su gira. Santorini, en cambio, es un escenario nuevo que representa ese deseo por lo desconocido que a menudo impulsa tanto a sus personajes como a su autora.
Protagonizada por Bris y Álvaro, la novela aborda un amor con fecha de caducidad, de esos que obligan a vivir el presente con la intensidad de quien sabe que nada es para siempre. “Si estás todo el rato pensando en el futuro, te pierdes el presente”, dice Maxwell. Y esa es la esencia de esta historia: aprender a disfrutar el momento, aun sabiendo que no durará.
A diferencia de sus obras más eróticas o desenfadadas, en Nuestro largo adiós predominan las emociones profundas, las relaciones familiares —tanto las sanas como las tóxicas— y el crecimiento personal. “Tiene sus escenas de sexo, claro, pero sobre todo tiene mucha vida”, explica la autora, que en esta ocasión ha querido centrarse en la parte emocional del vínculo, sin dejar de lado su estilo directo, cercano y positivo.
Maxwell no es solo una narradora del amor romántico: es también una voz que reivindica la fortaleza de las mujeres. En sus libros no hay princesas esperando ser salvadas, sino guerreras que luchan, que se caen y que se levantan. “Antes de querer a otros, tenemos que querernos a nosotras mismas”, afirma, convencida de que ese es el verdadero mensaje que late en cada una de sus historias.
Durante el encuentro en Fnac València, Megan Maxwell compartirá anécdotas sobre el proceso de creación de la novela, responderá preguntas del público y, como es tradición en sus visitas, dedicará tiempo a firmar ejemplares y conversar con quienes la acompañen.
