F. CHIRIVELLA SORIANO. Valeriola, 13
La geometría sigue siendo la apuesta de la Fundación Chirivella Soriano. Después de Monika Buch, llega al Palau de Valeriola otro militante del arte geométrico, pero de línea más fina y elegante. Martín Noguerol, uno de los referentes valencianos de la abstracción geométrica, muestra obra creada entre 1982 y 2006 que nace de la introspección personal y huye de lo evidente. No hay figuración ni mensaje de ningún tipo, ni falta que le hace. A través de formas, líneas y pocos colores (abundan el blanco y el negro) ensambla composiciones elegantes, sencillas y armoniosas, que beben de lo minimal. La corriente minimalista tiende a limpiar y a reducir las obras, pero después de Malevich y su cuadro Blanco sobre blanco(1916) Noguerol cree que no se puede ir a menos, por eso hay que buscar más complejidad, no menos, pero no necesariamente en el aspecto visual. “El arte no es simplemente lo que vemos”, afirmó en la rueda de prensa de presentación. Otra de las características de su obra es la serialidad porque no concibe el arte como una obra única y canónica, sino como un proceso de experimentación en el que la intuición juega un papel capital. A través de la repetición con pequeñas variantes consigue crear un ritmo que busca parecerse a la música o a la sucesión de fotogramas en el cine. Jugando con elementos sencillos (una finísima línea sobre sobre una geometría pintada al óleo) nos ofrece un sinfín de posibilidades. S.M.