Snõõper es una banda que, en un mundo de 33 ⅓ RPM, hace música de 45 RPM que tocan a 78 RPM. Este grupo punk DIY con sede en Nashville mantiene instrumentales súper precisos y voces hábilmente melódicas, incluso cuando aceleran casi todo el tiempo. Formada en 2020 por Tramel y el guitarrista Connor Cummins, las primeras grabaciones de 8 pistas de Snõõper fueron lanzadas por sellos de bricolaje. Aunque inicialmente no estaba destinado como un proyecto de actuación, el dúo dio vida a estas grabaciones con la incorporación de Cam Sarrett (batería), Happy Haugen (bajo) e Ian Teeple (guitarra). Super Snõõper fue grabado en The Bomb Shelter en Nashville. Dadas las breves visiones de la música de Snõõper a través de sus sencillos de 7 pulgadas, EP y emocionantes actuaciones en vivo, uno podría preguntarse si el grupo podría mantenerse para un álbum completo. La respuesta es un entusiasta sí. En palabras de Henry Rollins, “Hablando egoístamente, quiero que Snõõper se apure y haga otro álbum. Super Snõõper es un disco realmente genial”. Snõõper es conocido por su enérgico espectáculo en vivo que integra diferentes formas artísticas, como música, arte en video, marionetas, ensamblajes y más, para crear una experiencia única en cada actuación.
Prison Affair tiene los licks mutantes de Chuck Berry, el sonido de guitarra directo a la tabla, la rápida batería de hi-hat cerrado y el warble de cinta exagerado que quieres de este estilo, y si compras discos de este género, no puedo ver ninguna razón por la que no te encantaría. Si te gustan las nuevas bandas de punk, este disco es una obviedad; e incluso si no te gustan, hay un montón de cosas interesantes aquí si estás dispuesto a escuchar más allá del nivel superficial. Líneas de bajo profundas y psicóticas, además del caos de los sintetizadores más doblados. En la primera pista, “Big Bottom Baby”, tienes la sensación de descender a la prisión de un tubo de Internet. Adictivos trances de sintetizador thrashy y eggy, con voces firmes y monótonas que saltan a través de las melodías aceleradas, logrando complejidad e implicando capas en su sonido mientras mezclan temas con pistas locamente pegadizas. Esto les otorga el título de los actuales reyes de la situación eggy.