Lambda, col·lectiu LGTB+ per la diversitat sexual, de gènere i familiar, prepara una jornada especial con el título “Ser mayor y LGTBI+” por el día 1 de octubre, que en 1990 fue instaurado por la ONU como Día Internacional de las Personas Mayores. En ella, el colectivo LGTBI+ valenciano busca rendir homenaje a las personas mayores y subrayar la necesidad de garantizar sus derechos en una sociedad más inclusiva.
El objetivo de esta actividad es aumentar la conciencia sobre las realidades de las personas LGTBI+ en la vejez. Gran parte de estas personas pasaron parte de su vida en la sombra, lucharon por el reconocimiento de sus orientaciones y sus identidades hasta conseguir derechos para todas y ahora vuelven a sufrir discriminaciones y miedos. «Es inaceptable que, después de una vida de lucha, tengamos este miedo de sufrir rechazo de nuevo en un momento en que las personas tendríamos que ser atendidas con dignidad. Por eso, hace falta que las políticas inclusivas aseguren entornos seguros y respetuosos», explica Gonzalo Carbonell, responsable del grupo de Gente mayor de Lambda.
Uno de los focos de la jornada será la situación de vulnerabilidad de las personas mayores LGTBI+, el 40% de las cuales vive a solas, y el 60% tiene miedo de ser discriminada en las residencias por su orientación sexual o identidad de género, según estudios de la FELGTBI+. Después de décadas de represión e invisibilidad, estas personas todavía se enfrentan a grandes retos, como la soledad y el miedo de volver a esconder quiénes son para evitar conflictos en espacios que tendrían que ser de cuidados y compañía.
Cuatro personas ya mayores o que miran a su futura vejez reflexionarán en una conversación conjunta sobre las realidades que les esperan y sobre qué quiere decir envejecer con dignidad siendo LGTBI+:
- Carla Represa, activista trans mayor de 70 años
- Isabel Descals, activista lesbiana mayor de 45 años
- Àlec Casanova, activista trans mayor de 45 años
- Voro López, activista gay mayor de 70 años
Además, durante la jornada se realizará la proyección del cortometraje «Después de Cristo» (2024), dirigido por Irwin Lacröà, que ha participado en la sección oficial del festival K-lidoscopi, calificador para los Premios Goya. Narra la historia de Gonzalo Carbonell, ex sacerdote católico y cofundador de Lambda, quien, con 73 años, reflexiona sobre su vida como hombre gay, enfrentado al aislamiento y a las tensiones entre la fe religiosa y su identidad.
