L’ultim ball quiere ser un homenaje a tantos y tantos actores y actrices teatrales anónimos que, con sus espectáculos, más allá del éxito o del fracaso, del reconocimiento o de los premios, han hecho feliz a mucha gente. Habla de aquello por el que merece la pena vivir, de lo que a veces perdemos por el camino, de cómo poder convivir con la ausencia de aquello que nos hace feliz. Habla de cómo, por un sí o por un no, la vida se convierte en otra cosa. Del éxito o el fracaso, las dos caras de la misma moneda. Y de cómo tenemos en nuestra mano el timón para rehacer continuamente nuestra vida. L’ultim ball habla del placer de actuar, de vivir las cosas por primera vez, de jugar como hacíamos cuando éramos pequeños, y todavía no nos habíamos puesto la cota de malla para protegernos del mundo. Un espectáculo de humor. Divertido. Creado para hacer reír. Y llorar, como no. Si no lloras, no puedes valorar la risa. Un espectáculo para vivir más intensamente a pesar de que solo sea por un instante.
